¡Bienvenido, guerrero!

¡Buenos días! Me parece que no eres de aquí. ¿De dónde vienes?

Tienes razón. Soy un cazador errante de los muertos vivientes y vengo desde muy lejos. Llevo una vida nómada. Por culpa de mi trabajo no puedo tener una casa ni familia porque pueden necesitarme en cualquier lugar y en cualquier momento. Ahora he venido aquí y no es sin razón. Presiento que en esta tierra un mal enorme está punto de nacer. ¡Huele a peligro! ¡Te digo que se acerca una gran desgracia!

¿Qué tipo de desgracia? ¿Qué es lo que te ha inquietado tanto?

De momento, guerrero, no puedo responder a todas tus preguntas. Es un problema que no podré remediar contando sólo con mis habilidades. Hace poco vi un escrito misterioso en una lápida. No lo entendí, pero presentí el peligro. Sólo capté las primeras tres palabras. Hace mucho vi los mismos signos en el medallón de uno de los magos negros. Ponía en él: «¡Siervo de las fuerzas de oscuridad!». Guerrero, independientemente de lo que nos va a costar, debemos averiguar el sentido de las palabras de la lápida. ¡Esto nos dará la respuesta a muchas preguntas e indicará de dónde vendrá el peligro! ¡Tienes que ayudarme! He apuntado esos símbolos, mira.

¡Habla de los dragones gigantes que entrarán en nuestro mundo como huracán de fuego y convertirán en cenizas todo lo que se mueva!

Los signos hablan del pasado, de una estrella azul que iluminaba a todo este mundo y de las criaturas semitransparentes, una especie de fantasmas que lo habitaban.

El escrito de la lápida son palabras que hay que pronunciar al realizar la ofrenda al tenebroso dios de la muerte. (Escojo este)

El texto habla de un gran guardián Tallaar que se consideró más fuerte que el mismísimo Creador y contribuyó a la guerra del mundo con las tinieblas, a la lucha entre el bien y el mal.

Habla de algún tipo de siervos fantasiosos de las fuerzas de la oscuridad que no amenazan a nuestro mundo, sino sirven para asustar a los niños antes de dormir.

Habla del Templo Guuchar, destruido por los humanos primitivos.

Los escritos hablan de las transmisiones de la Piedra de Apariciones que advierten del peligro que se avecina para el mundo Faeo.

¡Los signos misteriosos hablan de un monstruo terrible, del gran Lingraón muerto y de las víctimas que los humanos perdidos le traen como ofrenda!

Mmm. No creo que sea del todo correcta tu lectura del texto de la lápida. No te hagas el sabio, sino ve a buscar a Flavio el Sabio. Él es más inteligente que tú, ¡que por el bien de toda la humanidad descifre este texto!

Su objetivo:

Ve a buscar a Flavio el Sabio, a la aldea Faitir y conoce la traducción exacta del escrito en la lápida.

¡Hola, guerrero! Han llegado tiempos difíciles. Cada hora vienen aquí los guerreros para pedirme consejo y ayuda.

¡Me inclino ante ti, Flavio!

¿De qué se trata esta vez?

He encontrado a un cazador errante de los muertos vivientes que me ha contado sobre algunos signos raros dibujados en una lápida. Según él, el escrito habla de un peligro cercano.

Sí, sí. ¡Ha empezado otra vez! ¿Guerrero, puedes enseñarme, qué es lo que pone allí exactamente?

¿Qué? ¿Qué ha empezado? Para eso he venido, para que me ayudes a descifrar los signos. Shiko y yo tenemos una teoría sobre este tema, pero nos gustaría tener más detalles. Mira, éstos son los signos.

Mmm, curioso… Siervo de las fuerzas de oscuridad… sí… ¡No puede ser!.. Sí, sí... ansias de sangre y que siembras el terror... ¡Ah sí, Lingraón! ¡Oh, dioses!

¡Flavio, no me tortures más! ¿Dime de una vez qué es lo que significan estos símbolos?

Los signos dicen: Siervo de las fuerzas de oscuridad e hijo de las pesadillas nocturnas, tú, que te alegras de la sangre derramada y del aullido del perro rabioso, tú, que tienes tantas ansias de sangre y que siembras el terror entre los mortales, tú, que andas entre las sombras del cementerio y viajas por los subterráneos oscuros, Zemerch, Lingraón, monstruo que tomas tu fuerza del mundo de los muertos, mira con buenos ojos nuestra ofrenda.

Son palabras extrañas e incomprensibles… Presiento que el peligro se esconde en ellas.

¡Estas palabras son un conjuro! ¡Hablan de la llegada de un cadáver siniestro de Lingraón! El paladín Shiko debería saber más de Lingraón que yo. Qué te diga todo lo que sepa.

Su objetivo:

Ve a buscar al cazador de los muertos vivientes, Shiko, al Sepulcro de los Monarcas y dile la traducción exacta del escrito de la lápida.

¡Por fin! Empecé a arrepentirme de no haber ido contigo! ¿Lo has conseguido?

Desgraciadamente, me he equivocado en la traducción. El sabio dijo que los signos son un conjuro dirigido a Lingraón…

¡Lo sabía! ¡Mis peores miedos se han confirmado! ¡El gran y siniestro Lingraón quiere liberarse una vez más y salir de su cárcel para ayudar al rey Magish a realizar su plan!

¿Qué es lo que quiere el rey Magish exactamente?

¡Quiere su destino y el mayor objetivo! ¡Quiere envolver nuestro mundo en tinieblas por cinco mil años!

¡Es terrible! ¡Hay que impedirlo!

¡Por supuesto! ¡Tenemos que impedirlo! Los escritos de la lápida son el conjuro de los siervos de Magish. La secta «Araña Negra» son fanáticos locos que adoran a Magish. Se inclinan ante él, sueñan con su regreso y harán todo lo que puedan para ayudarle a realizar el plan de hundir Faeo en la oscuridad. Con este conjuro, al que debe ir acompañada una ofrenda, intentan conceder a Lingraón un gran poder para que éste pueda salir de las mazmorras y liberar al rey Magish. ¡Guerrero, debemos estropear los planes de esos fanáticos! ¡Debes llegar hasta ellos y neutralizarlos!

¿Cómo puedo encontrarlos?

Creo que debes buscar entre la población local, quiero decir las capas más bajas y pobres. Ve al albergue Dybrach y habla con el carnicero u otro dignatario. Será muy útil preguntar si no han perdido ganado últimamente. Al fin y al cabo, los sectarios sacrificaban animales grandes. ¡Ve y qué los dioses te acompañen!

Su objetivo:

Ve a buscar al Verraco el carnicero, al Asentamiento Dybrach y averigua si no ha perdido últimamente a algún zorbo.

¡Buenos días, guerrero! ¿Qué te trae por aquí?

¡Hola! No he venido sin ninguna razón, el asunto es serio. ¿Dime, por favor, si en el poblado no han desaparecido últimamente los animales más grandes?

No recuerdo. Aunque, hace algún tiempo un magmar quiso comprarme un zorbo joven y vivo. No sé si te servirá una información así.

¡Es posible que sea lo que necesito! Cuéntame cómo fue exactamente.

No hay de qué hablar. Vino aquí un tipo sospechoso e insistió en que le vendiese un zorbo joven. Le dije que yo comerciaba con la carne y no con animales vivos, pero el insistía y ofrecía mucho dinero. Tuve que vendérselo. Así fue todo.

¿Qué tipo? ¿Lo has visto antes?

Primero creía que era algún mágmar desconocido para mí. Ahora sé que lo he visto antes. Si es el que estoy pensando, entonces vive en el pueblo Maettro.

Su objetivo:

Ve al pueblo Maettro y encuentra la casa del mágmar extraño. Ten cuidado, es posible que de esta forma se escondan los miembros de la secta. Después vuelve al Shiko al Sepulcro de los Monarcas.

Mientras estabas fuera, guerrero, me ha dado tiempo para neutralizar a unos cuantos esqueletos. ¿Cómo te ha ido?

¡He conseguido encontrar la sede de los sectarios y los maté a todos! Además, ahora tenemos la llave de la casa en la que se encuentra Lingraón dormido.

¡Guerrero, no me equivocaba contigo! ¡Sabía que eras tú la persona adecuada para resolver este problema! ¡Ahora que se ha hecho el primer paso, o sea que los fanáticos de Magish han sido neutralizados y la llave está en nuestras manos, debemos hacer el siguiente paso! Hasta que el peligro por parte de Lingraón esté cerca, no podremos dormir tranquilamente. ¡Debemos aniquilarlo, sea cual sea el precio!